Santiago de Chile, 10 de Diciembre 2010. (Radio del Mar). La tragedia en la cárcel de San Miguel con su saldo de muertos y heridos ha reabierto un debate sobre el discurso del gobierno en el combate a la delincuencia y su relación con el incremento en el hacinamiento de las cárceles. Parece claro que, a diferencia de lo expresado por Felipe Bulnes, Ministro de Justicia, las políticas implementadas desde marzo a la fecha, han hecho que éstas sean parte del problema y no de las soluciones.
Cuando todo se basa en arrestar la mayor cantidad posible de personas y se exige publicamente a los jueces que apliquen la máxima dureza en las penas, al margen que se viola la independencia del Poder Judicial, que tanto se aplaudió en el pasado, se ejerce una presión indebida que deja casi sin posibilidades de defensa a los imputados.
La absoluta incapacidad del gobierno para reconocer errores y realizar alguna forma de autocrítica, ha tenido como resultado que se encuentra aislado en sus posiciones y de esto no se puede acusar solamente a la oposición política ni a los errores del pasado.
Cuando se dice: «el discurso político sobre la delincuencia ha influido en el hacinamiento» y «hay un mensaje muy fuerte en el sentido de que no es bueno que las personas salgan en libertad ya que el mensaje de los políticos es que mejor que todas las personas estuvieran presas y no en libertad. Y esas son las consecuencias que provocan», es que algo muy grave está pasando. Más aún, cuando esto que hemos señalado no es parte de un discurso ni declaración de prensa de algún antipatriota que sólo busca dañar al gobierno, sino que fué expresado en el día de ayer por el Sr. Milton Juica, Presidente de la Corte Suprema de Chile.
De continuar por este camino, parece que muy pocos serán los amigos que tendrá el gobierno a futuro.*****FIN*****
