Santiago de Chile, 8 de Enero 2011. Ante la Comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara de Diputados, Eduardo Gordon General Director de Carabineros, aseguró que los hechos conocidos sobre irregularidades cometidas por funcionarios de ese cuerpo policial, eran «excepcionales» y que «se ejerce un estricto control al interior de la Institución», por lo que consideraba injusto estigmatizar a los más de 40.000 carabineros que actúan con total profesionalismo y apego a la legalidad vigente. Asímismo aseguró que no habrá defensa corporativa para aquellos que se vean involucrados en echos irregulares y dijo estar dispuesto a aplicar todas las medidas disciplinarias en los casos que se requiera. No existe ninguna razón para dudar de lo dicho por el General Gordon, ya que en más de una oportunidad, ha actuado de manera rápida y con total firmeza.
Pero es también cierto que la situación en Carabineros es preocupante. Según informó Carol Bown, subsecretaria de Carabineros, en el 2009 fueron «dados de baja» 13 oficiales y 14 en el 2010, sin indicar el número de suboficiales y personal subalterno afectados por la misma sanción. Pero algo pasa en Carabineros, como si hubiera una doble alma que la ha atravesado. Por un lado, su discurso de estar cerca de la ciudadanía, lo que vemos en innumerables ocasiones y por otro parece haberse empapado por esa paranoia de la seguridad ciudadana tan importante en los discursos del gobierno de Sebastián Piñera. Es como si hubiera existido una orden no escrita desde Marzo 2010, de dejar de ser el «carabinero amigo». Las palabras del Presidente al visitar la comisaría de Fuerzas Especiales, «encargada» de salvaguardar el orden público, fueron claras al respecto cuando manifestó: «sólo una policía temida podría realizar correctamente su trabajo».
Con la excusa del «orden público» que se debe proteger, se han violado derechos de expresión y de reunion y de ésto han sido víctimas, estudiantes, trabajadores, periodistas, documentalistas, dirigentes sociales, parlamentarios y alcaldes, cuyo único delito parece ser el pedir ser escuchados por un gobierno que no asigna valor al diálogo. Cuando una autoridad moralmente reconocida como Víctor Pérez, Rector de la Unidad de Chile, denuncia la violación de la autonomía universitaria y hace un llamado de alerta diciendo que con actos como este se transgrede la democracia y el estado de derecho, es porque algo mucho más profundo está en juego y no se trata sólo de «hechos aislados». Por eso la pregunta es válida: ¿ Qué está pasando en Carabineros una institucióon de Orden ?. ¿ Por qué tanto desorden ?. ¿ Cuáles son las nuevas órdenes ?.
Para tratar de que se tenga conocimiento de lo que está pasando en Carabineros, entregamos un listado cronológico de casos “puntuales” de funcionarios involucrados en actividades de delincuencia común, sobre la base de información de prensa.
El 16 de diciembre, cinco carabineros de la Séptima Comisaría de Renca, entre ellos un oficial, fueron detenidos por «quitadas de droga» a narcotraficantes y puestos a disposición de los tribunales de justicia.
Dos días antes, Canal 13 difundió videos que mostraban acoso y mal trato sicológico a un poblador, y consumo de drogas y alcohol en un cuartel policial.
Carabineros dio de baja a los seis funcionarios involucrados, entre ellos tres oficiales.
Parlamentarios de diversas bancadas pidieron la baja del cabo 1º Miguel Jara, luego que el fiscal militar Rodrigo Vera determinó que fue adulterado el chaleco antibalas del policía para simular un enfrentamiento y solicitó una pena de 15 años para el uniformado por la muerte del comunero mapuche Jaime Mendoza Collío, ocurrida el 12 de agosto de 2008 en La Araucanía.
Esto, al saberse que el cabo había sido trasladado a undécima región y se mantenía en servicio.
El 10 de diciembre, tres dirigentes del sindicato de buses del Transantiago (Sintratel) denunciaron haber sufrido torturas, heridas en la cabeza y hematomas al interior de la 52ª comisaría de Carabineros en Maipú, tras ser detenidos cuando se encontraban captando socios en un terminal de dicha comuna.
El 9 de septiembre, tres funcionarios de Carabineros fueron dados de baja, tras las acusaciones de violencia realizadas por hinchas de Rangers, tras el encuentro entre el elenco de Talca y Deportes Concepción, disputado en Linares. Imágenes de televisión mostraron la descomunal golpiza propinada a hinchas de Rangers de Talca, por descontrolados funcionarios uniformados.
El 30 de agosto, el Fiscal Militar de Puerto Varas, mayor de Ejército Rafael Vega, elevó el sumario a acusación en el caso del carabinero que en abril pasado disparo y dio muerte a un joven de 20 años en la localidad de Nueva Braunau.
El Fiscal Militar confirmó que tras cerrar el sumario acusó al cabo primero Sandro García, de dotación del retén de Nueva Braunau dependiente de la Primera Comisaría de Carabineros, de violencia innecesaria con resultado de muerte.
El hecho ocurrió el 9 de abril, cuando el cabo García junto a otro funcionario policial, se encontraban en un procedimiento en Nueva Braunau, registrándose un incidente con dos jóvenes. Sandro García, quien sigue cumpliendo labores en la institución, pero fuera de Puerto Varas, extrajo su arma de servicio, y por razones que son parte del sumario investigativo le disparo a José Aníbal Urzua Maldonado (20 años) quien dejo de existir en el mismo lugar.
El 30 de agosto fue detenido y procesado por la Fiscalía Militar de Puerto Varas por abuso sexual contra dos mujeres, el suboficial mayor de Carabineros, Víctor Hugo Navarro Coyopae.
También en el mes de agosto, Carabineros expulsó a un funcionario de la Séptima Comisaría de Renca a raíz de un altercado que sostuvo con un oficial de la mencionada unidad policial y que terminó con un disparo.
Según versiones de prensa, el uniformado habría sido sorprendido en una falta disciplinaria grave lo que fue constatado por el capitán Marco Loyola quien pidió explicaciones al policía por esta situación, ante lo cual este desenfundó su arma y efectuó disparos que por fortuna no dejaron lesionados.
El senador por el Movimiento Amplio Social (MAS) Alejandro Navarro y los padres del joven Franco Coronado Cárdenas (19), quien falleció a bordo de un furgón de Carabineros en Cabrero, Región del Biobío, se reunieron con el general director de Carabineros, Eduardo Gordon, para denunciar presuntos amedrentamientos.
El hecho ocurrió la noche del 27 de junio pasado, cuando Franco Coronado, junto a su hermano y su polola, participaban de una fiesta costumbrista en la zona. Se les denunció por desórdenes y Carabineros detuvo a los jóvenes para ser trasladados hasta la comisaría, pero en el trayecto se produjo la muerte.
Según la madre, “lo arrastraron por el suelo más de 100 metros, estaba muerto antes de subirlo al furgón, muchos testigos vieron cómo lo mataron”.
La Corte Marcial resolvió dejó sin efecto el procesamiento en contra de los dos funcionarios de Carabineros de Yumbel acusados de violencia innecesaria con resultado de muerte en contra de un Franco Coronado, el suboficial Mayor Raúl Neira Rodríguez y el cabo 2º Rafael Díaz Briones.
El suboficial Neira Rodríguez quedó en libertad mientras Díaz Briones fue sometido a proceso como autor de cuasi delito de homicidio en contra del joven, pero quedó en libertad provisional.
El 5 de julio, la prefectura de Carabineros de Viña del Mar dio de baja a dos suboficiales de sus hombres, a quienes se les imputa el delito militar de abandono de servicio y un presunto abuso sexual cometido en las inmediaciones del Valparaíso Sporting Club.
Se trata de dos cabos 2º pertenecientes a la 1º Comisaría viñamarina que, a eso de las 3.00, cuando se encontraban realizando patrullajes preventivos rutinarios, efectuaron un control de identidad a una mujer de 36 años, quien posteriormente denunció haber sido abusada sexualmente por parte de uno de los efectivos.
En el mes de junio, se produjo el mayor escándalo policial del año, cuando un total de diez funcionarios de Carabineros fueron detenidos y procesados por integrar una banda que se dedicaba al robo de cajeros automáticos y cajas fuertes de casas comerciales.
Los policías cumplían funciones en las Comisarías Segunda y 19º de Santiago, en la Prefectura de San Antonio y en la Comisaría de Santo Domingo.
Luego de la detención de estos diez carabineros, el general director de la institución, Eduardo Gordon, dispuso revisar la hoja de vida de todos los funcionarios.
En mayo, la Corte Marcial de Santiago le impuso una pena remitida de dos años al carabinero Walter Ramírez por el delito de violencia innecesaria con resultado de muerte en contra de Matías Catrileo, ocurrida en Vilcún el 3 de enero de 2008.
El 26 de mayo, un funcionario de Carabineros de la 15º Comisaría de Buin, identificado como Sergio Aguilar Avila fue detenido, luego de ser sorprendido cuando manejaba un automóvil que tenía encargo por robo y la patente adulterada, en la comuna de San Bernardo. El uniformado fue arrestado en una fiscalización efectuada por personal de la 14º Comisaría de San Bernardo, que detectó una irregularidad con la inscripción del vehículo y el policía cayó preso por receptación.
El 25 de mayo, dos cabos de Carabineros de la 19ª Comisaría de Providencia, fueron detenidos por su vinculación a una serie de robos a cajeros automáticos y hogares en la zona oriente de la capital.
El 13 de mayo, comuneros mapuches de Temucuicui acusaron a Carabineros de la prefectura de Malleco, de abusos contra niños de la comunidad. Los comuneros, por intermedio de la abogada Karina Riquelme, denunciaron ante la Corte de Apelaciones de Temuco que la policía apuntó con un arma de fuego a menores de la comunidad.
El 3 de mayo, el funcionario de Carabineros Julián Alonso González Venegas, de la Primera Comisaría de Carabineros de La Serena, fue dado de baja y formalizado por intentar abusar sexualmente a una menor de 14 años, en una fiesta en una casa particular en el sector de Las Compañías, de la misma ciudad.
El 15 de abril, la Corte Marcial otorgó la libertad a los tres Carabineros procesados por falso testimonio, a raíz de una investigación por violencia innecesaria en el marco del conflicto mapuche, en la Región de La Araucanía.
Se trata del capitán Diego Barba, el sargento 2° Robinson Osses y el carabinero Michael Carrasco, quienes se encontraban detenidos tras ser encausados por el fiscal militar Rodrigo Vera Lama.
El incidente se registró en Ercilla, en 2009, cuando los uniformados detuvieron en medio de un incidente a Carlos Curiñao, hijo del lonko Juan Curiñao, de la comunidad Huañaco Millao.
En la oportunidad, y según registros de televisión, funcionarios arremetieron contra el comunero mapuche mientras era conducido a la micro institucional.
El 12 de abril, incidentes que pudieron haber tenido graves consecuencias, se registraron en el frontis del retén de Carabineros de Nueva Braunau, comuna de Puerto Varas, hasta donde llegaron a protestar alrededor de 30 personas, principalmente jóvenes, tras finalizar el funeral de José Aníbal Urzúa Maldonado (20 años) que falleció tras recibir un impacto de bala de un carabinero.
El 27 de marzo, la fiscal Paola Jofré, de la Sexta Fiscalía Militar procesó a dos carabineros, por la muerte del arquitecto Mario Oviedo (29), quien falleció la madrugada del 28 de junio de 2009 en las afueras de un bar en el sector de Bellavista, comuna de Providencia.
El 22 de marzo, una mujer denunció haber sido víctima de una golpiza por parte de carabineros de Valdivia, en el recinto de la Saval, donde había acudido a presenciar el rodeo.
La mujer, identificada como T. M. Ch. manifestó que ese día «sin mediar motivo» Carabineros comenzaron a golpear en sus brazos y piernas dejándole visibles moretones; que la llevaron a los calabozos de la Primera Comisaría, que quedó en libertad al día siguiente, y que en su billetera faltaba dinero que había girado desde su cuenta bancaria.
El 18 de febrero, dos carabineros fueron dados de baja por su participación en el robo a una joyería. Ambos uniformados, pertenecían a la Prefectura Santiago Cordillera.
El 31 de enero, tras ser sorprendida robando en una tienda de un mall de la comuna de Huechuraba, fue sometida a proceso la capitana de Carabineros Paola Venegas, de la 30° comisaría de radiopatrullas.
La oficial fue sorprendida en la tienda Ripley de dicho centro comercial y sólo al momento de ser retenida por guardias de la tienda, se determinó que se trataba de una oficial de la policía uniformada.
¿ Hechos puntuales o una tendencia a la desviación en la función policial que se está manifestando con alarmante frecuencia ?.*****FIN*****
Fuente antecedentes cronológicos: Estudio realizado por la Facultad de Derecho de la Universidad Diego Portales.