Santiago de Chile, 27 de enero de 2011. (Ecoceanos News)– ONGs y sectores de la Iglesia Católica chilena rechazaron hoy la agenda que sostendrán los presidentes Sebastián Piñera y Barack Obamal, cuando en Santiago comiencen conversaciones para imponer en Chile bases nucleares para generar electricidad para la industria minera que opera en el norte del país sudamericano.
“Hasta ahora Chile se ha mantenido alejado de los riesgos de la energía nuclear, y este nuevo intento por introducirla en la agenda política, obedece a intereses económicos, como los que manejan la oferta y la demanda en el sistema energético chileno actual”, dice una declaración difundida este jueves por el Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales y que firman el Obispado de Aysén, una agrupación de laicos católicos y diferentes otras Ongs ambientalistas y de consumidores.
Este miercoles el Ministro de Exteriores, Alfredo Moreno, dijo al diario Lanacion que con Estados Unidos, Chile también lleva “una conversación en el tema de energía nuclear sobre la que, como ustedes saben, Chile está haciendo estudios. No hay ninguna decisión pero sí tenemos que recuperar el tiempo y estar en condiciones para que, cuando se pueda tomar esa decisión, tengamos las personas, la institucionalidad, para poder tomarla y en eso Estados Unidos también puede ser ayuda”.
La presión por eléctrica en base a energía atómica “responden a las necesidades de la gran minería, principalmente multinacional, la agroindustria y los grandes negocios y sectores de altos ingresos en las ciudades”.
Definitivamente no responden a las necesidades para el bienestar social, la educación, la salud, la cultura y la entretención de la sociedad chilena, afirman las agrupaciones ciudadanas.
Agregan que “Chile NO está en crisis energética y las proyecciones de demanda para los próximos años y décadas son las de un desarrollo insustentable e injusto. Responden a las necesidades de la gran minería, principalmente multinacional, la agroindustria y los grandes negocios”
Las Ongs además afirman que “esta nueva arremetida nuclear, de la mano de la diplomacia norteamericana”, está siempre “al servicio de sus oscuros intereses económicos repartidos en el mundo”.*****FIN*****