Santiago de Chile, 28 de marzo 2011. (Radio del Mar). Todavía se mantiene el efecto de las impactantes imágenes del doctor James Hamilton durante su participación en el programa Tolerancia Cero de Chilevisión. El desgarrador relato del abuso sexual a que fué sometido por el sacerdote Fernando Karadima, junto a otros niños y jóvenes de y en la Parroquia del Bosque, las consecuencias que han tenido esos hechos en sus vidas pese al tiempo pasado y el dolor que ha significado revivir esas situaciones por las querellas que han interpuesto, no dejó indiferente a nadie.
Pero hubo otros aspectos de su relato y que poco a poco comienzan a ser conocidos y que están vinculados a la red de protección que encubría las aberraciones de este sacerdote. Está claro que una parte de esa complicidad estaba en personas vinculadas a la Iglesia, en que no dudó en señalar al Cardenal Errazuriz y cuatro obispos de diferentes diócesis. Pero también señaló con mucha claridad a personas de la familia Matte, pertenecientes al grupo económico mas poderoso de Chile.
De ellos se ha conocido ahora su estrecha amistad con Karadima, los fastuosos regalos que le hacían como autos 0 kilómetro, las vacaciones compartidas, el pago que realizan con otros empresarios para que los mejores y más caros abogados del país lo defiendan y también como actuaron tratando de dañar la imagen del Dr. Hamilton en la Clínica Santa María donde trabajaba, con acusaciones sobre supuestos delitos sexuales que éste habría cometido.
Como demostración clara y terminante de que esta protección es cierta, no tiene límites y se ejerce sin ninguna vergüenza, el señor Eleodoro Matte, el hombre más rico de Chile, fué a hablar con Sabas Chahuan Fiscal Nacional, para expresarle su interés en el caso y su deseo de que se agilizara.
Pero esto no es una entrevista cualquiera. Un hombre muy poderoso, llama por teléfono a la Fiscalía, pide entrevistarse con el Fiscal sin dar otra razón que «se trataba de un asunto personal», es recibido de inmediato, se escucha todo lo que viene a plantear, se comparte un café con él en muestra de intimidad y ahora se dice que no hubo ninguna presión, que se pensó inocentemente que había sido víctima de algún delito y que por eso venía.
¿ Es que el Fiscal nacional recibe sin demora a cualquier ciudadano que quiera hablar con el sin ninguna razón específica, le concede todo el tiempo del mundo y lo convida con un café para que se sienta cómodo ? Si es así, este país tiene un funcionario público ejempllar. No hay que olvidar que hace un año el Fiscal nacional dijo que en este caso no creía que hubiera ocultamiento por parte de la Iglesia.*****FIN*****