Santiago de Chile, 7 de Marzo 2011. (Radio del Mar). Esta vez no es en Libia ni en otro país del Medio Oriente, sino que la «revolución popular» se produce en la Universidad Católica de Chile. Los dirigentes de las diferentes facultades y centros, encabezados por Giorgio Jackson Drago Presidente de la Federación de Estudiantes de esa casa de estudios (FEUC), se movilizaron exigiendo la renuncia de Andrés Arteaga Manieu, Obispo Vice Gran Canciller de la Universidad por la influencia negativa que tiene en el ambiente estudiantil que se le mantenga en el cargo, debido a la defensa pública que hiciera del sacerdote Fernando Karadima acusado y condenado por la propia Iglesia por pedofilia y abuso de menores.
Ha ofendido también la conciencia de los dirigentes y estudiantes, el hecho de que la actitud del Obispo Arteaga, en lugar de escuchar, acoger a los denunciantes e investigar las acusaciones, las descalificó de manera inmediata, denigrando a quienes tuvieron el coraje de hacerlas.
Esta mañana, Mons. Ricardo Ezzati le entregó a Arteaga su «voto de confianza» considerándolo un «gran obispo, con mucha trayectoria y un gran teólogo», pero ante la presión de los estudiantes, el cúmulo de hechos, sin olvidar la investigación en curso sobre los recursos de la Parroquia de Karadima y que maneja Arteaga, hace muy pocos momentos decidió aceptarle la renuncia.
La Iglesia dio a conocer esta tarde un comunicado en que afirma que «Monseñor Ricardo Ezzati, ha acogido la permanente decisión de Monseñor Andrés Arteaga Manieu, de dejarlo en libertad de acción en relación al cargo de Vice Gran Canciller de la Pontificia Universidad Católica de Chile».
Al mismo tiempo el comunicado afirma que «como Arzobispo de Santiago, a Monseñor Ricardo Ezzati le corresponde en plenitud el cargo de Gran Canciller, de acuerdo a los Estatutos Generales que le confiere la Pontificia Universidad Católica de Chile».
Andrés Arteaga era parte del grupo Union Sacerdotal que dirigía Karadima, quién fue además su padre espiritual *****FIN*****
