Valparaíso, 20 de abril de 2011. (Radio del Mar)– El Senado aprobó este martes la Ley que implementa el etiquetado informativo de alimentos «chatarra» y restringe la publicidad y venta de estos nocivos alimentos en establecimientos educacionales. Sin embargo, las organizaciones de consumidores y asociaciones médicas criticaron que el lobby empresarial este presionando para que en forma poco usual el gobierno del Presidente Sebastián Piñera «vete» esta normativa y la debilite.
El veto presidencial es una acción última y que el Presidente utiliza para negarse a firmar una Ley o parte de ella. Pero a la vez es considera una intevención de un poder del Estado sobre otro. En definitiva, en esta ocasión, sigue observándose el poder de influencias que están teniendo las compañías de alimentos para llegar a esta inédita situación en que el Ministerio de Salud le quitó apoyo a la iniciativa y la propia Moneda deba asumir la defensa corporativa de los industriales de la comida chatarra.
Para la Liga Ciudadana de Consumidores «el proyecto es un gran avance», pero espera que el Presidente Piñera no «intervenga y debilite una normativa que es parte de las urgentse y necesarias adecuaciones de la Salud Pública a las nuevas formas de vida de la ciudadanía chilena».
La organización de consumidores además llamó a los senadores a «defender su autonomía y trabajo pues el veto presidencial representaría un llamado de atención del Gobierno respecto a que la labor legislativa estaría mal hecha».
La discusión en el senado estuvo cubierta por el peculiar acuerdo al que habría llegado el Presidente del Senado, Gido Guirardi, y el Ministro de Salud, Jaime Mañalich, para que la ley se apruebe y luego el Gobierno vete la normativa.
El singular pacto, que dejo afuera a sectores políticos de la oposición y de la alianza gobiernista, sigue siendo fuertemente cuestionado, pues varios parlamentarios critican que sea el propio Presidente del senado quien ceda a la intervención del gobierno en el Poder Legislativo.
El acuerdo Girardi-Mañalich se llegó en un contexto en que la Multinacional Nestle anunció que no regalaría más dinero a obras de caridad en Chile; la patronal de industriales, la influyente SOFOFA, amenazó con desempleo; la ultraderecha sacó a sus mejores hombres -como el senador Pablo Longueira- a defender la «libertad de elegir»; y los conservadores institutos de estudios, como Libertad y Desarrollo, dijeron que se originará un «Mercado Negro de Golosinas».
El veto presidencial buscaría debilitar la prohibición de venta de alimentos considerados «altos en» grasa, azúcares o sal en establecimientos de educación superior. Y también, dejar sin efecto la prohibición de publicitar los sucedáneos de la leche materna y la obligación de impartir charlas en todos los niveles de enseñanza escolar sobre vida sana y alimentación saludable para circunscribirla a una vez por nivel de enseñanza (preescolar, básica y media).
Pero las organizaciones de consumidores temen que el Presidente Piñera «agarre tijera y pegamento» para cortar ciertas reglas y agregar elementos que son de interes de la industria.
¿Cuales son los aspectos positivos de ley aprobada ayer en el Senado?
Para la Liga Ciudadana hay cinco aspectos muy buenos en el proyecto que fue aprobado ayer por el Senado:
1. Se prohibirá la venta de comida chatarra al interior de los establecimientos de educación pre básica, básica y media;
2. Se incluirán programas educativos sobre alimentación saludable en los establecimientos de educación pre básica, básica y media;
3. El articulado también dispone la obligación de incluir al menos tres bloques semanales de actividad física;
4. Se restringirá la publicidad de la comida chatarra y se impedirá la utilización de ganchos tales como sticker, monitos y adhesivos;
5. Se elaborará un etiquetado comprensible que evite las prácticas de desinformación, donde gran cantidad de alimentos tienen escondida sal, grasa y/o azúcar, o son disfrazados como alimentos saludables.