Santiago de Chile, 3 de Abril 2011. (Radio del Mar). Los acontecimientos de los últimos tiempos que han ido acompañados de graves acusaciones de abuso sexual a niños varones y mujeres, la destitución o renuncia de jerarcas, el hecho no menor de que ahora aparezcan obispos involucrados, los desórdenes administrativos al borde del desfalco y lo pagado con dinero de la Iglesia para acallar testigos en el caso karadima, enfrentan a la iglesia católica chilena a un escenario en que los cuestionamientos a sus principios éticos y morales adquieren una gran fuerza y se han transformado ya en un sentimiento mayoritario en la población.
Pero la iglesia como organización universal con un gran poder, tiene siempre recursos a qué acudir. Es así que acaba de aterrizar en Santiago para asesorar a la iglesia chilena, el señor Juan Manuel Mora, vicerector de comunicaciones institucionales de la Universidad de Navarra, centro del Opus Dei en España. Este personaje, soltero y sin hijos, de vida dedicada sólo a la Orden, como se denomina a esa secta, fue director mundial de comunicaciones del Opus Dei y en tal rol, dirigió la campaña contra el daño de imagen generado a nivel mundial en el año 2006 por la película «El Código da Vinci».
Ha llegado a Santiago con un lema: «Cuando uno comete un delito no basta con pedir perdón» y cree que para borrar esa imagen de que algo se oculta, se debe abrir «hasta la puerta de la cocina».
Los «precios» que cobra el Opus Dei por sus operaciones de salvataje suelen ser muy altos y se pagan en posiciones de poder, como el recordado caso que evitó la quiebra financiera del Vaticano. Muy pronto se será testigo de la estrategia que imponen y si pasan a ocupar o no nuevos cargos en la jerarquía de la iglesia chilena.*****FIN*****