Santiago de Chile, 12 de octubre de 2014. (Radiodelmar.cl)— La histórica y tradicional conmemoración del 12 de octubre en Santiago, que regularmente era un encuentro de la diversidad de los pueblos que habitan el Cono Sur, la defensa de la lucha Mapuche, el repudio a un modelo económico y político destructivo de la vida y el medio ambiente y del vínculo entre la sociedad organizada chilena y las diferentes expresiones indígenas, fue reprimida y cercenada para que no pudiera terminar en la fiesta comunitaria que regularmente ocurría luego de la caminata por las calles de la capital chilena.
A pesar que en esta ocasión los principales discursos políticos ocurrieron al principio y se logró marchar por la Alameda, a cuadras del Palacio Presidencial de La Moneda, la desmedida represión de la policía militarizada cortó la caminata y despojó de la parte final de esta tradicional actividad, donde regularmente personas, familias organizaciones y comunidades, se encontraban cada año para compartir y conversar.
Fue innecesario el discurso de las políticas de orden y seguridad, incluso de protección de la propiedad pública y privada. La represión, a juicio de varias personas que tradicionalmente participan en esta anual conmemoración, fue orientada a terminar con el encuentro de familias, de exterminar el vinculo de comunidades y organizaciones, de perseguir la reunión de personas que se dan cuenta de la abusiva y cruel forma como un pequeño pero poderoso grupo de funcionarios, políticos y empresarios, manejan estos territorios.
El lema de la marcha este año fue “Estado Chileno: Tus Mentiras No Detendrán el Digno Avance de Nuestra Resistencia ¡¡Turpu Newentuaiñ!!”; y representaba la expresión de comunidades y organizaciones Mapuche que de diferentes maneras han avanzado en la recuperación y el control territorial, la defensa del Medio Ambiente, la reconquista de los derechos políticos y la búsqueda de autonomía como Pueblo.
También expresa el rechazo a la sistemática aplicación de estrategias estatales por parte de los gobiernos chilenos por seguir imponiendo el despojo de los recursos naturales, la exclusión de la participación política, la eliminación de la historia de estos territorios, la aplicación fraudulenta del derecho internacional y la creación de una cuestionada y abusiva institucionalidad en el área de Pueblos Indígenas, Medio Ambiente, Cultura y Derechos Políticos, entre otros ámbitos.
A pesar de la represión, las voces que se escucharon fueron el llamado a la Unidad del Pueblo Mapuche, la persistencia y resistencia en la lucha por la recuperación de los derechos como Pueblo, la difusión de lo que está ocurriendo en los territorios del Cono Sur de América, y la búsqueda entre los Mapuche y la sociedad chilena organizada por avanzar al buen vivir, a la defensa de la vida y la naturaleza.*****FIN*****
