Sin la presencia del célebre artista chino Ai Weiwei, fue inaugurada la exposición en La Virreina Centre de la Imatge de Barcelona, On the Table, que acoge 42 obras de Ai Weiwei.
Ai Weiwei, ícono chino del arte mundial, no puede salir del país porque las autoridades chinas le han retirado el pasaporte, después de permanecer 81 días de arresto en paradero desconocido en 2011.
El motivo del gobierno serían las continuas críticas de Ai Weiwei contra las violaciones de los derechos humanos en su país. Ai Weiwei se ha negado a guardar silencio.
Las autoridades chinas consideran desde entonces a Ai Weiwei un “enemigo público” y un “criminal”, además de estar acusado de evasión fiscal y pornografía.
La muestra en Barcelona está compuesta por fotografías, vídeos, instalaciones, maquetas, esculturas, proyectos de diseño gráfico, publicaciones y música. Según el catálogo de la muestra pretende reflejar «la vida y la experiencia de Weiwei como artista y activista comprometido con la sociedad» y «documenta las realidades políticas y sociales de la China actual».
La ausencia de Ai Weiwei en Barcelona se ubicaría en una campaña del presidente Xi Jinping, para que el arte “sirva al socialismo”, y que decretó que los artistas chinos tendrán que pasar “al menos un mes” en comunidades rurales o en zonas de producción minera. Efectivamente, la Administración de Prensa, Publicaciones, Cine, Radio y Televisión enviará a equipos de rodaje a zonas rurales de China para que “convivan con las masas” y creen películas y series de televisión con temáticas dictadas por el Gobierno. Un centenar de periodistas, presentadores y directores de programas televisivos serán llevados a trabajar a zonas o “áreas que contribuyeron a la victoria en la revolución”.
El presidente Xi Jinping destacó en un discurso ante escritores, artistas plásticos y audiovisuales celebrado en el Gran Palacio del Pueblo de Beijing que deben cambiar su actual modo de trabajo, ya que –según él– el arte “está lleno de vulgaridad y lujuria”.
Ai Weiwei, el niño terrible de la élite cultural china, pasó varios meses encarcelado por fraude fiscal y tiene prohibido salir del país.
El padre de Ai Weiwei era el reconocido poeta Ai Ching. Ching fue miembro del partido comunista, un poeta marcado por su permanente paso por las cárceles. Pero su lealtad con el comunismo se vio cuestionada durante los 60.
Ve el film sobre su arte, donde Ai Weiwei de 58 años ha dicho:
“De los 40 gatos que tenemos, solo uno sabe abrir la puerta. ¿De dónde viene su inteligencia?”
https://www.youtube.com/watch?v=QAADXK9MeOU