Existe un malestar creciente en la ciudadanía de Santiago.
Primero vino la remodelación de la Plaza de Armas, cambios cosméticos que no significaron ninguna mejora significativa para los ciudadanos que ocupan esa plaza.
Ahora es la remodelación del Parque San Borja, licitación ya cocinada por la Municipalidad de Santiago a de costo de 1000 millones de pesos.
Por supuesto, los ciudadanos residentes en el entorno están en pie de guerra.
Los vecinos se han organizado en una Coordinadora Ciudadana y defienden el Parque San Borja pues consideran que el único pulmón verde de ese sector, la municipalidad de Santiago lo convertirá en un peladero.
Consideran que el parque actual es un pequeño jardín secreto en medio de la ciudad, lleno de frondosos árboles que cobijan con su sombra a más cinco mil vecinos del sector. El pequeño bosque interior sostiene un ecosistema que alberga zorzales, gorriones, palomas y otras aves e insectos que por más de 40 años conviven en armonía con la ciudadanía. En el parque además de desarrollan actividades vecinales de adopción y educación de tenencia responsable hacia los animales.
La licitación municipal incluye la colocación de 238 esculturas de Mario Irarrazábal donadas por la Fundación Piedra Viva y extenderá la calle Marcoleta, lo que liquidará la existencia tranquila del parque.
La propuesta de cambio del Parque San Borja es de la firma Bbats+Tirado y fue aprobada por el consejo Municipal.
La firma Bbats+Tirado parece especialista en cemento, si uno mira sus proyectos realizados, principalmente hospitales, como el nuevo Hospital de Talca. La firma está dirigida por los catalanes Jorge Batesteza, Silvia Barbera y Cristóbal Tirado.
Fuente: Salvemos el Parque
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