Se espera que Japón utilice la derrota de la propuesta del Santuario de Ballenas del Atlántico Sur como argumento para continuar su estrategia de propaganda sobre la supuesta disfuncionalidad de la CBI y presionar a la comisión a adoptar su iniciativa ballenera (Way Forward), la cual busca, entre otros, eliminar la moratoria sobre la caza comercia.
Florianópolis, Brasil, 11 de Septiembre de 2018 (CCC News) – Una iniciativa liderada por Japón en la reunión de la Comisión Ballenera Internacional (CBI), conocida como ‘Camino Hacia Adelante o Way Forward’, afirma que sus miembros deben respetarse mutuamente para que la Comisión pueda avanzar. Sin embargo, ayer quedó en evidencia la falta de compromiso de dicho país en respetar los derechos de conservación y uso no letal de los cetáceos de la mayoría de los miembros de la Comisión. La propuesta para la creación del Santuario de Ballenas del Atlántico Sur, liderada por Brasil, sufrió en Florianópolis su mayor derrota en los últimos años debido al bloqueo, liderado por la nación asiática, de los votos necesarios para su aprobación.
Países sin tradición ni relación a la caza de ballenas de África y el Caribe que votan en bloque con Japón a cambio de “programas de asistencia financiera” han sido nuevamente los responsables de evitar que la Comisión alcance el 75 por ciento de los votos necesarios para la creación de una importante área de conservación para ballenas en el Atlántico Sur. Durante sus intervenciones quedó en evidencia el completo desconocimiento de dichos países en la propuesta, argumentando que ésta no cuenta con justificaciones científicas. Sin embargo, ésta cuenta con el aval del Comité Científico de la CBI.
Para Elsa Cabrera, directora ejecutiva del Centro de Conservación Cetacea “resulta irónico que el rechazo sistemático durante los últimos 20 años a esta iniciativa de conservación y uso no letal de las ballenas sea utilizado por Japón como excusa para afirmar que la CBI es un organismo disfuncional, cuando es este mismo país es el responsable de haber creado una ‘simulada polarización’ entre sus miembros”.
Se espera que Japón utilice la derrota de la propuesta del Santuario de Ballenas del Atlántico Sur como argumento para continuar y fortalecer su estrategia de propaganda sobre la supuesta disfuncionalidad de la CBI y presionar a la comisión a adoptar su iniciativa ballenera (Way Forward), la cual busca, entre otros, eliminar la moratoria sobre la caza comercial y enmendar por primera desde su creación hace más de 70 años el mecanismo de decisión de la CBI para que todas las decisiones de adopten por mayoría simple.
En dicha propuesta Japón argumenta que la disfuncionalidad de la CBI se refleja en la incapacidad de la Comisión de avanzar hacia la adopción de propuestas como el Santuario de Ballenas del Atlántico Sur o el fin de la moratoria sobre la caza comercial, deslegitimando la labor de este organismo internacional. Por ello, argumenta Japón, sería necesario enviar una fuerte señal a la comunidad internacional que la CBI puede trabajar armónicamente a pesar de las divisiones existentes entre sus miembros.
El camino “Hacia Adelante’ de Japón ignora convenientemente los significativos avances que ha hecho la Comisión desde la adopción de la moratoria en materia de conservación y uso no letal de ballenas, que se ve reflejado en un creciente número de proyectos e iniciativas relacionadas a temas emergentes, los cuales están siendo efectivamente trabajados en colaboración con otros foros internacionales.
“A pesar de todos los esfuerzos realizados por Japón para mantener la CBI ‘disfuncional’ y prisionera de sus intereses balleneros, lo cierto es que nunca antes en su historia este organismo había tenido tanto prestigio internacional en materia de conservación y uso no letal de los cetáceos. Prestigio que podría ponerse en riesgo si sus miembros ceden ante una campaña de propaganda orientada a limitar el enfoque de la Comisión a la caza comercial de ballenas bajo un marco regulatorio retrogrado y carente de mecanismos de monitoreo, cumplimiento y sanción” agregó Cabrera.