Carlos Mondaca, presidente de la Corporación de Puertos del Conosur, explica que este hecho se debe a la paralización en las zonas donde zarpan la mayoría de las naves turísticas internacionales que realizan la temporada en el país y Sudamérica.
Uno de los sectores más afectados por la pandemia del Covid-19 es el de los cruceros, incertidumbre que obligó a esta industria a detenerse desde marzo de 2020. Para Carlos Mondaca, presidente de la Corporación de Puertos del Conosur, sostuvo que a Chile no arribarán este tipo de buques durante el presente año.
“Debido a las reiteradas extensiones de la pausa en la actividad de cruceros en Estados Unidos, desde donde zarpan la mayoría de las naves turísticas internacionales que realizan la temporada en Chile y otros países sudamericanos, estos buques no llegarán a los puertos nacionales en 2021, pudiendo ser la única excepción los recorridos que pasan por Punta Arenas y Puerto Williams con rumbo a la Antártida”, asegura.
Mondaca agrega que “tras los últimos acontecimientos en las líneas de cruceros en Estados Unidos, Canadá y Europa, es altamente improbable que Chile vaya a recibir naves de pasajeros durante 2021. Hasta ahora, son solo ocho las compañías que han retomado actividades en rutas marítimas y fluviales selectas en Europa. En tanto en Asia, específicamente Singapur, se desarrollan los llamados «cruceros a ninguna parte», lo que podría replicarse con algunos buques de exploración en torno a la Antártica y los fiordos chilenos”.
Para el presidente de la Corporación de Puertos del Conosur, la situación implica un desafío para la industria de cruceros como país ya que “es una oportunidad para que nuestros territorios observen lo ocurrido en otras latitudes y trabajemos en adaptar la manera en la que nuestros turistas puedan recibir una atención acorde a las condiciones de salubridad que nos serán exigidas en este nuevo escenario”.
“En esto, los municipios jugarán un rol fundamental en la atención de los cruceristas y, si hoy ya sabemos que las líneas navieras exigirán al pasajero una vacuna Covid y test PCR al momento de embarcarse, es lógico que le pidan algo similar a las ciudades de Chile que aspiramos a recibirlos nuevamente. El comercio informal que se genera en torno a cada recalada, sin duda, será uno de los puntos a mejorar”, aclara.
Según Mondaca, otro elemento a considerar es que “los puertos de Chile que reciben cruceros – a excepción de Punta Arenas y Puerto Williams en el extremo sur, que también reciben naves que van a la Antártida – son parte de un circuito que incluye Uruguay y Argentina, por lo que es una necesidad coordinar esfuerzos con nuestros vecinos para que el fin del mundo se vea como una oferta homogénea y sanitariamente hablando, compatible con los nuevos tiempos que corren y que están marcados por el Covid-19”.
En cifras, solo durante la temporada 2019- 2020 llegaron 275 cruceros al país y un total de 294.236 pasajeros a territorio nacional. “Siempre se ha dicho que un crucerista deja entre 100 y 150 dólares por persona cuando bajan del buque. Al tomar las últimas dos temporadas en su conjunto, estamos hablando que llegaron a Chile más de 582 mil cruceristas, lo que representa un número importante de ingresos para el comercio local de las ciudades puerto”, dijo el presidente de la Corporación de Puertos del Conosur.