La Organización Meteorológica Mundial (OMM) alertó este miércoles que hay un 70% de probabilidades de que el actual episodio del fenómeno La Niña se extienda al menos hasta el fin de año, lo que lo convertiría en el primer “episodio triple” que se registra en este siglo, al alcanzar tres inviernos boreales consecutivos.
El secretario general de la OMMS, Petteri Taalas, destacó la excepcionalidad de que un episodio de La Niña hile tres años de duración y señaló que si bien su efecto de enfriamiento ralentiza temporalmente el aumento de las temperaturas mundiales, “no detendrá ni invertirá la tendencia al calentamiento a largo plazo”.
En este sentido, el organismo puntualizó que pese a la persistencia del episodio de La Niña en las partes central y oriental del Pacífico ecuatorial, se prevé que en el resto del mundo se impongan de forma generalizada temperaturas de la superficie del mar superiores a la media, contribuyendo a que también las temperaturas de las zonas terrestres superen las normales, sobre todo en el hemisferio norte.
En su boletín especializado en el fenómeno*, la agencia explicó que las condiciones que han permitido la instauración de un episodio de La Niña en el Pacífico tropical desde septiembre de 2020 se han reforzado debido a la intensificación de los vientos alisios entre julio y agosto de este año.
No obstante aclaró que el alto porcentaje de probabilidades de que La Niña se prolongue disminuirá a 55% de diciembre a enero próximos.
Exacerbamiento de la sequía y las inundaciones
La OMM señaló que el fenómeno ha tenido efecto en las temperaturas y las precipitaciones, exacerbando tanto la sequía como las inundaciones en diferentes partes del planeta.
El titular del organismo de la ONU indicó que en los casos del Cuerno de África y de la parte meridional de Sudamérica, la agudización de la sequía tiene el sello de La Niña, al igual que las precipitaciones por encima del promedio observadas en el sureste asiático y Australasia.
“Desafortunadamente, los datos más recientes sobre La Niña confirman las proyecciones climáticas regionales que apuntaban a un agravamiento de la devastadora sequía que sufre el Cuerno de África, cuyas consecuencias afectarán a millones de personas”, lamentó Taalas.
Apoyo a la comunidad humanitaria
En este sentido, aseguró que la agencia de la ONU continuará divulgando información a la comunidad humanitaria y que apoyará el trabajo en las áreas agrícola, de seguridad alimentaria, salud y reducción de riesgos de desastre.
“La OMM también trabaja para que todas las personas tengan acceso a los sistemas de alerta temprana en los próximos cinco años a fin de protegerlas de los peligros relacionados con el tiempo, el clima y el agua”, dijo.
La Niña es un fenómeno que enfría a gran escala las aguas superficiales de las partes central y oriental del Pacífico ecuatorial, además de producir otros cambios en la circulación atmosférica tropical, como en los vientos, la presión y las precipitaciones. Por lo general, sus efectos en el tiempo y el clima son opuestos a los de El Niño, que da lugar a una fase cálida.
El Niño y La Niña son importantes condicionantes del sistema climático de la Tierra, pero no son los únicos.
Efecto de la humanidad
La OMM subrayó que todos los fenómenos climáticos de origen natural ahora se producen en el contexto del cambio climático provocado por la actividad humana, lo que acelera el aumento de las temperaturas mundiales, intensifica los fenómenos meteorológicos y climáticos extremos, y altera la configuración de las temperaturas y las precipitaciones estacionales.
* El boletín El Niño/La Niña Hoy se basa en los pronósticos de los Centros Mundiales de Producción de Predicciones a Largo Plazo de la OMM, y los datos que contiene están a disposición de los gobiernos, la ONU, las instancias que toman decisiones y otras partes interesadas de sectores sensibles al clima con el propósito de que puedan implementar medidas de preparación y proteger vidas y medios de subsistencia.