Los y las trabajadoras del buceo requieren de una “regulación especial”, pues su especificidad y riesgos son distintas a las de los otros trabajos regulados por el Código del Trabajo, por lo cual se deben regular por un “Estatuto Laboral” distinto que incluya una jornada laboral diferenciada por el constante riesgo a que se enfrentan, además de otras especifidades de la actividad de submarinistas. En la foto aparecen dirigentes del Sindicato de Buzos, la Ministra del trabajo Jeanette Jara, la abogada asesora de los buzos Fabiola Gaete y Senador Fidel Espinoza.
Valparaíso,Chile, 09 de Noviembre de 2022 (Ecoceanos News)– El diputado Mauro González Villarroel señaló que se votará hoy en la sala de la Cámara de Diputados el proyecto de resolución presentado junto a otros parlamentarios, el cual busca crear el “Estatuto Laboral de Protección al Buzo Profesional”. Este proyecto es una de las tres iniciativas presentadas.
Si bien el Código del Trabajo establece en su artículo Nº 962 que “se entiende por personal embarcado o gente de mar el que, mediando contrato de embarco, ejerce profesiones, oficios u ocupaciones a bordo de naves o artefactos navales”.
Sin embargo, esta norma que regula a quienes trabajan embarcados, no tiene incidencia en los trabajadores y trabajadoras que desarrollan la función de “buceo” profesional en el área pesca y acuicultura. A tal punto es clara la postura sobre el particular, que la propia ley no refiere en específico a la citada labor.
Por ello, los y las trabajadoras del buceo requieren de una “regulación especial”, pues su especificidad y riesgos son distintas a las de los otros trabajos regulados por el Código del Trabajo, por lo cual se deben regular por un “Estatuto Laboral” distinto que incluya una jornada laboral diferenciada por el constante riesgo a que se enfrentan.
Estatuto Laboral de Protección del Buzo: Exigencia central del Sindicato Nacional de Buzos de Chile
La creación de un “Estatuto Laboral de Protección del Buzo” constituye una de las exigencias centrales del Sindicato Nacional de Buzos de Chile, ya que, según esta organización, estos trabajadores y trabajadoras se encuentran “invisibilizados en el Código del Trabajo”.
Por lo mismo, indican que “el establecimiento del reglamento para el buzo profesional y la aplicación de tablas de descompresión actualizadas constituyen la base de este Estatuto en los aspectos de jornadas y condiciones laborales que protejan la seguridad del buzo.”
Esto es evidente que al no existir claramente lo señalado el “buzo” en la Ley Laboral (Código del Trabajo) y de Mutualidades (Nº16.744), no se incluye el reglamento del buceo y la tabla de descompensación en los contratos de trabajo de los buzos, lo cual conlleva la falta de protección para la vida y salud de ellos.
Por ello, la carencia legal antes citada, posibilita –tal y como han señalado los propios buzos-, situaciones de abuso, explotación laboral, discriminación y el no respeto a los derechos humanos de los trabajadores.
“Las faenas de buceo son consideradas como unas de las más exigentes y riesgosas en la actividad de la salmonicultura industrial, ya que las condiciones en las que se realizan no son adecuadas, existiendo una alta precarización en las condiciones de trabajo en los centros de cultivo, generando el récord mundial de accidentes invalidantes y muertes de trabajadores de la industria de salmonicultura global”, señala el Centro Ecocéanos.
Según los reportes “Salmones de sangre del sur del mundo” elaborado por el Centro Ecocéanos, entre el 2013 y 2022 han muerto 72 trabajadores y trabajadoras de la industria del salmón en Chile mientras laboraban en los centros de cultivo, plantas procesadoras, y actividades de transporte marítimo y terrestre vinculados a los monocultivos industriales de salmón.
Sólo entre el 2021 y agosto del 2022, han fallecido 15 trabajadores que laboraban para el cluster salmonero. Las estadísticas de la organización ciudadana señalan que los buzos representaron el 42% de las de muertes en la industria salmonera durante el 2021. “Estas cifras son inaceptables al compararlas con las estadísticas de accidentabilidad de la industria salmonera en Noruega, Canadá o Escocia” indicó la organización
