Hoy jueves 22 de diciembre, a las 19:30 en el Refugio Lopez Velarde del pasaje Simpson 7, la Casa del Escritor los destacados escritores Jorge Calvo y Leo Lobos presentan el libro sobre escritores y su relación con Machu Picchu (Ginsberg, Allende, Borges y Neruda) de Omar Pérez Santiago, con ilustraciones de Athenea Llana.
Pérez Santiago ¿Qué tal fue tu viaje a Machu Picchu?
Cuando uno vive largas horas en internet, el mundo análogo parece ajeno y lejos. Pero, una vez puesto en el camino, viajar es una de las cosas más gratas. Viajar a Machu Picchu fue un viaje placentero. Subir muchas escaleras y tomar té de coca para no tener mayores sobresaltos. El turismo está super bien organizado. Y los peruanos, muy amables.
Hoy en día, sin embargo, las fronteras están cerradas en Machu Picchu.
Sí. Es la paradoja. Ayer tuvieron que evacuar a los turistas Machu Picchu en helicóptero. La vía del tren a Machu Picchu fue cortada. Nosotros los chilenos sabemos lo que es que un país se paralice. Lo hemos vivido hace muy poco. Por cierto, como chileno entiendo la gravedad de la situación del Perú. Comprendo la inquietud y me pongo en el lugar de los peruanos.
¿Presentar un libro de escritores en Machu Picchu en un momento crítico para el Perú?
En estas ocasiones me gusta recordar un cuento apócrifo, que nos gustaría que fuese cierto. Un día un diputado regañó a Winston Churchill pues no quiso recortar el presupuesto de cultura, en pleno ataque nazi a Londres. Churchill habría respondido: «Si no es por la cultura, entonces, ¿para qué luchamos?
También luchamos por la cultura, para que haya más frivolidad, más viajes, más conciertos de música, más exposiciones, más presentaciones de libros y más charlas inútiles. Nunca podemos olvidar nuestro derecho a lo lúdico y popular. Que la juventud pueda ir en bici y tomar una cerveza con amigos en una grata terraza.
Es la esperanza de que resurja el mundo trivial que añoramos. Nos gusta vivir, gozar de la vida.
¿A los escritores siempre le ha llamado la atención Machu Picchu y la intensa vida cultural en el Cusco?
Allí siempre hubo numerosas chicherías y picanterías, llamadas escuelas democráticas peruanas. Una amplia vida social, cultural y artística. Ahora, antes de estos días críticos, los restaurantes del Cusco estaban llenos, la agenda cultural estaba plena de presentaciones de libros, estrenos de teatro y exposiciones.
En el Cusco hay gente parecida a mí: escriben libros, artículos, dan conferencias… Escritores que viven en hogares con muchos libros, parecido a mi hogar. Y al igual que a mí, a ellos les gusta cenar con amigos, y estirar la sobremesa hablando sobre literatura o lo que sea. Somos humanos.
¿Y qué une a los escritores como Ginsberg, Allende, Borges o Neruda?
La curiosidad. Para los escritores como Ginsberg, Allende, Borges o Neruda ese era también el sentido de la vida. ¡Un poco de vino, reír y charlar hasta la madrugada!
Y corregir textos, editar manuscritos. Creo en eso. Hay mucha gente que lee libros de literatura. Y esa gente quiere seguir leyendo literatura, y alguien tendrá que escribirla y editarla.
Crees que la vida cultural siempre sobrevive, a pesar de todo…
Tomar un café en una bonita cafetería, ver pasar la gente, charlar.
Eso uno nunca, nunca debemos olvidar: creo que la vida es para eso. En parte se lucha por esto. Y para mí, y para los escritores, no hay nada más importante que esto. Esa es nuestra causa, nuestra pequeña bandera.