«Smärtpunkten», Punto de Dolor, es una nueva serie de la televisión sueca sobre un drama real que conmovió al país escandinavo: los brutales asesinatos de dos policías en Malexander en la primavera de 1999.
La macabra historia es la siguiente:
En el año 1999 se realizó un proyecto teatral en Suecia con presos de la cárcel de Tidaholm como actores. La obra de teatro se llamó «Sju tre» y fue escrita por Lars Norén.
El ingrediente es muy llamativo. Lars Norén (1944-2021) era uno de los más importantes dramaturgos suecos. Junto con la productora Isa Stenberg iniciaron el proyecto teatral llamado «7:3»
Eran tres criminales graves, los criminales más peligrosos de Suecia. Dos de ellos eran nazis. Tony y Ola, eran nazis declarados. A pesar de ello, Lars Norén continúa el trabajo y les insiste en que su nazismo se incluya en la obra.
Ingenuamente, con una fuerte carga de ideología del «buenismo», Lars Norén, la productora Isa Stenberg y la Junta de Prisiones creen que pueden manejar a los nazis.
Ingenuamente creen que los nazis pueden cambiar a través del trabajo teatral, llegar a un entendimiento, abandonar su ideología, adaptarse a la sociedad y dejar de ser nazis.
La productora Isa Stenberg se esfuerza por cuidar a los prisioneros, los lleva y trae a la institución, los deja quedarse en su casa, les cocina.
Los nazis parecen obedecerle, sonríen y aparentemente se adaptan, a pesar de que la violencia acecha constantemente bajo la superficie. Tony está en secreto en constante contacto con otros nazis y que, junto con él, pronto cometerán los espantosos asesinatos de dos policías en Malexander.
Isa Stenberg, la productora ingenua, cree que tiene el control de los reclusos. Isa, justo antes de que los hombres con el torso desnudo estén a punto de subir al escenario, descubre que Tony tiene un nuevo tatuaje con un lema nazi en el pecho.
Ella le dice que se ponga una camiseta antes de que comience el espectáculo, pero él se niega. Luego los hombres salen al escenario sin camisa y con tatuajes nazis visibles.
El día después de la última actuación de «Sju tre», uno de los presos, Tony Olsson, robó el banco Östgöta Enskilda en Kisa y también participó en los asesinatos de los dos policías en Malexander.
Ella, Lars Norén, la Junta Nacional de Servicios Penitenciarios, pensaron que podían controlar y poner las condiciones, y que los nazis se comportarían obedientemente .
Pero, la historia termina con el desastre, una tremenda tragedia sueca que ahora es una serie de televisión.
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