Brigitte Bardot, 23 años en «Una Mujer Como Satanás» (1959) película dirigida por el maestro Julien Duvivier.
Julien Duvivier (1896-1967) es uno de los grandes del cine francés. Brigitte Bardot lo llamaba «Dudu».
La película «Una Mujer Como Satanás» es una adaptación cinematográfica de la novela de 1898 «La mujer y el títere» de Pierre Louys.
En 1919, Duvivier dirigió su primera película, Haceldama ou Le prix du sang. Durante la década de 1920, filmó las películas: Credo ou la tragédie de Lourdes y L’abbé Constantin y La Vie miraculeuse de Thérèse Martin, sobre la santa carmelita Teresa de Lisieux.
Julien Duvivier hizo melodramas populares, thrillers, epopeyas religiosas, comedias, filmes de propaganda para la guerra, musicales y adaptaciones literarias de novelas de Émile Zola, León Tolstoi, Irène Némirovsky, y Georges Simenon.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Duvivier se trasladó a los Estados Unidos gracias a un contrato con MGM. En América hizo cinco películas: Lydia (1941), Cuentos de Manhattan (1942), Piel y fantasía (1943), El Impostor (1944), con su socio de siempre, Jean Gabin, y El destino (1944).

Julien Duvivier fue un director de cine francés cuya obra abarcó varias décadas y estilos, dejando un legado significativo en la historia del cine. Su valor en el cine se puede apreciar en cuatro aspectos:
UNO: Versatilidad y dominio de géneros:
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Notable capacidad para trabajar en diversos géneros cinematográficos, desde el drama y el romance hasta el thriller y la comedia. Esta versatilidad le permitió explorar una amplia gama de temas y estilos visuales a lo largo de su carrera.
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Duvivier es un cineasta que no hace más que películas que no se parecen entre sí, para que no se parezcan a él. Eso se le ha reprochado como una debilidad: huye del estilo para explorar todos los géneros, la diversidad es su única regla. Cada película es diferente de la anterior.
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DOS: Innovación visual y técnica:
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Habilidad para crear atmósferas visuales distintivas y por su dominio de la técnica cinematográfica. Sus películas a menudo se caracterizaban por una cuidada puesta en escena, una iluminación expresiva y un uso innovador de la cámara.
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TRES: Exploración de la condición humana:
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Muchas de las películas de Duvivier se centraron en la exploración de la condición humana, abordando temas como la soledad, el destino, la moralidad y la complejidad de las relaciones humanas. Sus personajes a menudo se encontraban en situaciones difíciles, lo que permitía al director profundizar en sus motivaciones y emociones.
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CUATRO: Contribuciones al cine francés clásico:
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Duvivier fue una figura importante en el cine francés clásico, y sus películas son consideradas obras maestras del período. Su influencia se puede apreciar en el trabajo de muchos directores posteriores.
