Para el senador Navarro “después de tanta evidencia del lobby que se ejerció a favor de la industria y de la corrupción en que se gestó la ley de Pesca, esperar a que la FAO se pronuncie, es caer en la inercia”.
Santiago, 14 de enero de 2015. (radiodelmar.cl)– Para el senador del MAS Alejandro Navarro “el actual contexto político generado por el caso Corpesca, permite que hoy los ciudadanos estén tomando nota de cómo van a votar sus diputados respecto de la Ley Longueira, por lo que esta vez hay un elemento de presión ciudadana que espero sea determinante en la votación”.
A juicio del senador Alejandro Navarro “los pescadores artesanales de todo el país, ven en este proyecto de ley una oportunidad real de revisar la ley de Pesca. Esto, ante un Ministro de Economía, que no ha logrado percibir la profundidad de la crisis que vive la pesca artesanal”.
Para Navarro “el actual contexto político generado por el caso Corpesca, permite que hoy los ciudadanos y ciudadanas estén tomando nota de cómo van a votar sus diputados respecto de la Ley Longueira, por lo que esta vez hay un elemento de presión ciudadana que espero sea determinante en la votación”.
Del mismo modo, Navarro criticó la forma en que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha llevado adelante el proceso de revisión encargado por el Gobierno “la FAO a la fecha no ha citado a ningún sindicato a ser parte del proceso de revisión de la actual ley de Pesca, no ha existido ningún mecanismo de participación, ni menos de socialización de cómo se llevará adelante el procedimiento, contrariamente a lo que se había comprometido el Ejecutivo”.
Para el senador Navarro “después de tanta evidencia del lobby que se ejerció a favor de la industria y de la corrupción en que se gestó la ley de Pesca, esperar a que la FAO se pronuncie, es caer en la inercia”.
Navarro hizo énfasis en que “la iniciativa legislativa iniciada en moción de los diputados Hugo Gutiérrez y Daniel Núñez busca la nulidad de la ley y no la derogación, ya que de ser derogada la actual ley de Pesca, el Estado tendría que indemnizar a las empresas de las siete familias, tal como lo dejó amarrado el ex ministro de Economía Pablo Longueira”.
Para finalizar el congresista por la región del Biobío argumentó que “la ley Longueira no hay anularla sólo porque es ilegítima en su origen, al ser fruto del cohecho en el Parlamento, sino también porque de no anularse, esta ley predatoria condenará a los pescadores artesanales a desaparecer, siendo devorados por los industriales”.