Santiago de Chile, 25 de Enero de 2011. (Radio del Mar). Las palabras de Jaime Mañalich Ministro de Salud de que «la batalla por una mejor salud tiene bajas», al justificar la renuncia presentada por Liliana Jadue a la subsecretaría de su ministerio, tiene un trasfondo que va más allá de un simple cambio de autoridades. Ante todo, es extraño que Rodrigo Hinzpeter Ministro del Interior haya irrumpido con declaraciones apresuradas para tratar de fortalecer esa imagen que se quiere presentar, de que el alejamiento de Jadue es voluntario, como si se tuviera el temor que la verdadera crisis y los negocios en salud que tan bien se pretende ocultar, puedan ser involucrados en la discusión.
Cuando Luciano Cruz Coke echó a Nicolás Bar, Subsecretario de Cultura, al igual que lo sucedido en el mismo sentido por Camila Merino de Trabajo con Marcelo Soto subsecretario del Trabajo o cuando también en Salud Mañalich despidió a Giovanni Gutiérrez de Redes Asistenciales, Hinzpeter no dijo una palabra y por eso es extraño que lo haga ahora y de manera tan formal.
Por eso, las palabras del Ministro tienen un significado particular, porque hoy es Salud, mañana Educación y pueden seguir otras batallas y esto parece un anuncio de que las «bajas seguirán». Encontrándose casi agotada la excusa del terremoto, parecen entonces aparecer las nuevas justificaciones en aras del interés general y superior del país que no permitirá nada que se oponga o critique los planes del Presidente Piñera, a menos que se quiera correr el riesgo de transformarse en una nueva «baja».
Es bueno recordar y preguntarse si: ¿ Vitto Sciaraffa Superintendente de Isapres, Alvaro Sapag Director Ejecutivo de la Conama, Osvaldo Palma Seremi de Salud del Maule y ex Diputado RN, Ximena Ossandón en Junaeb, el Director del Fosis de Arica, diferentes Seremis, Gobernadores y Jefes de Servicio que hemos visto desaparecer en menos de un año de gobierno junto a 4 ministros, habrán sido «bajas» o cambios necesarios ?.*****FIN*****