23 - noviembre - 2024

Una historia para recordar: en 2011, el fútbol en Cuba cumple 100 años

Santiago de Chile, 9 de Febrero de 2011. (Radio del Mar). En este 2011 el fútbol en Cuba cumple cien años. En 1938, llegó a los cuartos de final en el Mundial de Francia. Tierra de grandes deportistas, este país no pudo sostener ese protagonismo más tarde. Alguna vez, el seleccionado soñó con tener a Maradona de técnico.

 Cuenta la historia del fútbol cubano: el 11 de Diciembre de 1911, en los terrenos del ya desaparecido Campo Palatino, en la barriada del Cerro, se disputó el primer partido oficial en este país del Caribe. Se enfrentaron el Sport Club Hatuey (formado por cubanos y españoles) y el Rovers Athletic Club (compuesto por ingleses, escoceses, irlandeses y galeses). El encuentro fue ganado por los británicos por 1-0. Aquel gol inaugural lo marcó el capitán Jack Orr.

 Pero este deporte ya había nacido bajo el cielo de este territorio. El mismo Hatuey ya había jugado el 10 de Febrero de 1910, contra un grupo de marinos de un buque inglés recién arribado a La Habana. Los recibieron con goles: 8-0 ganaron los jóvenes cubanos y españoles. Cuatro días más tarde, sucedió otro encuentro, en Cienfuegos: tripulantes de otro barco inglés vencieron al Sport Club por 2-0.

 Antes, en 1907, se había creado la Federación Football Asociation de Cuba, organismo creado entre otros por Manolo Rodríguez y Raúl Lombardo. El Club Sportivo Hatuey fue el primero en surgir, en ese mismo año. Ya en 1909, se fundó el Rovers Athletic. Era el principio de una historia que ahora cumple un siglo de su primera expresión oficial. Un siglo de goles y de golpes, que va desde la épica participación en el Mundial de Francia 1938 hasta el puesto 175 en el ranking de la FIFA en 1994 (su peor ubicación) y las deserciones de varios de sus futbolistas.

 Y en este recorrido, hubo un día en el que Cuba rompió los pronósticos e instaló la sorpresa: el 9 de junio de 1938, en el estadio Chapou de Toulouse, obtuvo la primera victoria de un seleccionado caribeño en los Mundiales. Esa tarde disputó el desempate de los octavos de final ante Rumania y ganó 2-1. Cuatro días antes, en el mismo estadio, había igualado contra los europeos 3-3 en un partido tremendo que duró más de 120 minutos.

 Un gol de Bindea, en el primer tiempo, se pareció bastante a un mazazo final. Pero no. Había espíritu de lucha y convicción en aquel equipo que había llegado al Mundial de Francia por las deserciones de Costa Rica, Guayana Holandesa (hoy República de Surinam), El Salvador y México. En cinco minutos, entre Socorro y Maquina —los dos autores de los goles, a los 5 y 10 minutos del segundo tiempo— transformaron la derrota en un triunfo memorable, el único en la única participación cubana. Después, entre el coraje y las manos del arquero Ayra se sostuvieron la victoria y la clasificación.

 En los cuartos de final del primer Mundial francés, tres días después en el Du Fort Carre de Antibes, se rompió el hechizo ante Suecia: 8-0 y despedida. Contó Juan Tuñas -único sobreviviente de aquel encuentro- en una entrevista reciente: «Antes del partido nos consideraron favoritos, por la manera en que habíamos jugado. Pero sucedió algo que no esperábamos: llovió y el campo se inundó. No estábamos acostumbrados a eso, nos resbalamos una y otra vez, y terminamos perdiendo 8-0». Igual, ellos ya habían construido el capítulo más feliz de la historia del fútbol cubano. Con un detalle añadido: ningún equipo de la CONCACAF (ni siquiera México y Estados Unidos como locales) superaron jamás la instancia de cuartos de final en una Copa del Mundo.

 Cuba no pudo jamás repetir aquella proeza. Ni siquiera estuvo cerca porque jamás volvió a acceder a un Mundial. Y, más allá de dos participaciones olímpicas, tampoco consiguió hacerse fuerte a nivel regional (por ejemplo, nunca obtuvo el oro en la Copa del Caribe). Caso curioso para un país que tantos grandísimos deportistas le dio al mundo (desde Javier Sotomayor y Alberto Juantorena a Dayron Robles y Regla Torres). Para impulsar el fútbol en Cuba, en algún momento de 2003, a Fidel Castro se le ocurrió la posibilidad de contratar a su amigo Diego Maradona. Pero quedó en eso: un entusiasmo que se murió al nacer.

 Ahora, el centenario ya se empezó a celebrar. La edición 96 del Campeonato Nacional de Fútbol (CNF) comenzará con un festejo evocativo. Y será la antesala de la participación del seleccionado cubano en la Copa de Oro de la CONCACAF, que se disputará en junio en Estados Unidos. A esa competición -la más importante a nivel regional- se clasificó luego de subirse al podio en la Copa del Caribe, disputada en Martinica. En la actualidad, Cuba ocupa el puesto 65 del ranking de la FIFA, dos lugares por debajo de Venezuela y justo detrás de Nueva Zelanda, representante de Oceanía en la Copa de las Confederaciones y en el Mundial de Sudáfrica 2010.

 No será un torneo más. El presidente de la Federación Cubana de Fútbol, Luis Hernández, señaló que está confirmada la asistencia a las conmemoraciones del titular de la FIFA, Joseph Blatter. Como en muchos países de la región -asiduos votantes del dirigente suizo-, Cuba recibe el beneficio económico del Proyecto Goal. Así, se posibilitó la creación del Centro de Entrenamiento Mario López. También la máxima entidad del fútbol donará un terreno sintético que será instalado en el estadio La Polar, de La Habana. Allí, este fútbol que cumple un siglo tratará de volver a asombrar como en aquella mágica ocasión, bajo el cielo de Francia.*****FIN*****

WALDEMAR IGLESIAS

 

 

 

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