Desde el lunes 1 de septiembre, el horario punta del Metro tendrá un valor de 700 pesos, $640 el valle y $590 el horario bajo. A pesar de las graves falencias del Metro hace unas semanas, que obligó a la evacuación de forma precaria de miles de personas, la decisión la adoptó el Panel de Expertos del Transporte Público,
Pero las explicaciones no convencieron a los usuarios, que no dudan en manifestar su molestia en las redes sociales.
El Panel de Expertos surgió durante el primer gobierno de Michelle Bachelet. En septiembre del 2009, ella solicitó al parlamento la aprobación de un subsidio para el transporte público. Senadores de la Coalición por el Cambio propusieron un Panel como garantía de que el déficit del sistema se financiara con los subsidios permanentes y no con alzas indiscriminadas de pasajes. El Ministro René Cortázar designó en ese Panel de Expertos, a tres ingenieros comerciales, José Tomás Morel, Patricio Rojas, y Juan Enrique Coeymans. El Reglamento del Panel de Expertos, fue firmado por el ministro Cortázar y el ministro Andrés Velasco. La metodología para determinar el alza de pasajes la decidió ese mismo gobierno y fue publicado en un Decreto.
Ese “Panel de Expertos” no tiene representación popular ni de los usuarios del sistema o de las asociaciones de consumidores. Suben el pasaje aduciendo cálculos técnicos, pero que nadie nunca ha conocido, pues desde que se formó ese Panel, no se han publicado sus supuestos requisitos técnicos, a pesar del reclamo de las organizaciones de consumidores.
El alza de pasajes es un malparido de “metodologías” y “Paneles de Expertos”, una alianza de economistas, sin representación popular ni de los usuarios del sistema o de las asociaciones de consumidores.
Se inventó “Panel de expertos” para, según la Ley, determinar el alza de pasajes del Transantiago, basados en factores específicos y determinados por una metodología teóricamente neutral y matemática, establecida por Decreto presidencial. La fijación de precios quedó así en manos monopólicas.
El gobierno de Bachelet, en septiembre del 2009, ante el escandaloso fracaso del Transantiago solicitó al parlamento la aprobación de un subsidio especial para el transporte público. Los honorables aprueban la Ley Nº 20.378 que inyectaba masas de dinero a un sistema colapsado y desfinanciado, en medio de sus empujones, insultos, gritoneos, presiones y regateos de los parlamentarios.
Tal como lo consigna la Historia de la Ley Nº 20.378, el mensaje presidencial de mayo del 2009 no contemplaba el “Panel de Expertos”. Pero, en medio de la trifulca parlamentaria, senadores de la Coalición por el Cambio lo propusieron como garantía de que el déficit del sistema se financiara con los subsidios permanentes y no con alzas indiscriminadas de pasajes. Así nació este hijo no deseado de Frankestein. Las alzas se harían de acuerdo a las variaciones de insumos del sistema, y no para financiar los errores del sistema. Por ley, las alzas no deberían ser para compensar las pérdidas que provoca la ineficacia del sistema, ni por la alta evasión de pasajes, como sugieren hoy algunos.
El mensaje de la presidenta Bachelet no contemplaba el “Panel de Expertos”, pero al final, este Nuevo Ente adquirió un rol protagónico, y la ley definió que el “monstruito” estará conformado por tres integrantes nombrados por el Ministro de Transportes, (dos con mediación de la Alta Dirección Pública y uno a partir de una terna propuesta por los Decanos de Ingeniería y de Economía de las universidades acreditadas).
Así, el Ministro René Cortázar, el 10 de enero del 2010 designó en ese Panel de Expertos, a tres ingenieros comerciales que –al igual que él- estudiaron en la Universidad Católica y en universidades norteamericanas: José Tomás Morel Lara, Patricio Rojas Ramos, y Juan Enrique Coeymans Avaria. El Reglamento de funcionamiento del Panel de Expertos, fue firmado por el Ministro Cortázar y el Ministro Andrés Velasco, y se publicó en el diario oficial el 16 de febrero del 2010.
La metodología para determinar el alza de pasajes la decidió ese mismo gobierno y fue publicado en un Decreto firmado por Bachelet y publicado en el Diario Oficial el 10 de marzo del 2010, un día antes de terminar su periodo presidencial. Según esa metodología, el alza de pasajes se calcularía con las variaciones de 8 factores, en base a las cifras del Instituto Nacional de Estadísticas (INE): los aumentos en los precios del Diesel, de Lubricantes, de Neumáticos, los índices de índice Costo Mano de Obra Nominal, de Precios al Consumidor, y del promedio de productos importados del sector industrial. Además, el promedio mensual del Dólar y el Euro.
Suben el pasaje pero, hasta ahora, nadie ha visto públicamente sus cálculos exigidos por ley. Y eso genera molestias amplias en los maltratados usuarios del Metro.
