Por: Verónica Figueroa Huencho
15 DE SEPTIEMBRE DE 2021 Revista TIME
“Hoy se crea un nuevo Chile: pluralista, multilingüe, con todas sus culturas, con todos sus pueblos, con sus mujeres y con todos sus territorios. Este es nuestro sueño de redactar la nueva constitución «. Con esas palabras, Elisa Loncon Antileo, asumió la presidencia de la Convención Constitucional de Chile en julio. El organismo, que reescribirá nuestra constitución actual luego de la era de la dictadura, es la culminación de un levantamiento social de dos años contra la desigualdad y la injusticia profundamente arraigadas y que llevó a millones de chilenos exigir cambios en el país.
Por primera vez en la historia, los pueblos indígenas están participando en la vida del estado como representantes de sus naciones originarias, y la presidente Elisa representa siglos de esos sueños y luchas. Nació en la comunidad mapuche de Lefweluan, en tierras ancestrales. Como activista, la enseñanza del idioma mapuche se convirtió en su gran cruzada, reconocida internacionalmente. Mujer brillante y distinguida académica, con dos doctorados, ha hablado del amor, y de escucharse.
La hermosa piel morena de los mestizos y los pueblos indígenas se ha mantenido fuera de los pasillos del poder, pero es en esos pasillos que ahora camina Elisa Loncon Antileo. En su luz, las niñas y niños indígenas pueden ver la posibilidad de un futuro mejor.
Figueroa Huencho, es mapuche, profesora asociada de la Universidad de Chile.
