Nuestra posición ante la hidroelectricidad, es que somos partidarios de las micro y minicentrales, aunque no en cualquier parte, ni pasando por encima de las comunidades, patrimonio, biodiversidad, destrucción del turismo y áreas protegidas. Lo mismo con otras energías renovables no convencionales.
Por: Peter Hartmann, Director CODEFF Aisén, Presidente Agrupación Aisén Reserva de Vida. 05 de julio de 2024
Entre los acontecimientos de la semana pasada abundaron aquellos eléctricos. Por un lado, nos enteramos todos, no sin sorpresa, que habría una importante alza en las tarifas y por otro, tuvimos acá el lanzamiento regional del Centro Nacional de Soluciones Energéticas Avanzadas, SEDA , un nuevo organismo relacionado y con financiamiento de la Subsecretaría de Energía, en el cual participan varias universidades encabezadas por la FCFM de la U de Chile y que tendrá “un enfoque socio-ecológico justo para mejorar la calidad de vida de las personas en el territorio”. A nivel regional es la U. de Aysén quien nos representa (una universidad que como es conocido no cuenta con especialistas en materias energéticas).
Este lanzamiento, aconteció con el seminario “El nuevo rol de la hidroelectricidad en Chile” el cual pretendía relevar la importancia de la hidroelectricidad en la red nacional y regional, la riqueza en recursos y la posibilidad de una matriz 100% de energía renovable y “desarrollar el potencial de soluciones energéticas descentralizadas en la región y la integración masiva de centrales hidroeléctricas”.
Acudimos a dicho seminario precedido ya de polémica al no habérsenos invitado a exponer nuestra posición de organizaciones de la sociedad civil, y que como es conocido, la tenemos (diez años Patagonia sin Represas y dos en la política energética regional). Y también hemos presentado la “Propuesta Ciudadana de Política Energética para Aisén Reserva de Vida”. De hecho, recién recibimos invitación a asistir a ese evento el día anterior.
En cuanto al seminario en sí, ahí predomino la visión empresarial en varios matices. Quien iba a mostrar una experiencia en un “proyecto hidroeléctrico de propiedad compartida” del ministerio de Energía, fue reemplazado por otro, que mostró un proyecto de energía solar en Talagante (en todo caso eso de “compartida” es una interesante idea). El representante del SEDA, Rodrigo Palma, hizo énfasis en que 74% de la escorrentía de agua del país se encuentra en esta región, lo cual evidentemente le da un carácter y oportunidad.
En tanto, el expositor y gerente de SAESA, Rodrigo Miranda, dejo en claro que no era llegar y contar con mas hidroelectricidad, al existir barreras con períodos de escasez de agua y que el contar con mas energía renovable no iba a provocar rebajas notables en la tarifa. También confidenció que si bien la Ley de Equidad Eléctrica dispone que la diferencia de tarifas entre una empresa y otra a lo largo del país no serán mayores a 10%, en la región eso no ocurre, siendo 20% y que esa equidad solo es para las tarifas residenciales, lo cual no ayuda mucho en economía -empleo -PYMES. (¿Habrá alguna autoridad que se ocupe de esta inequidad e injusticia?).
En lo demás, estuvo la ponencia del ex seremi de Energía, Carlos Diaz, ahora consultor, en pro de hidros micro y mini, mostrando un buen ejemplo como la minicentral Don Víctor. En el otro extremo, el ex presidente de ACERA, ahora consultor, ingeniero Rolf Fiebig, propuso toda una plaga de represas, canales, trasvasijes y autopistas hormigonadas a lo largo de Chile. Un millonario negocio, que unas décadas atrás habría sido grito y plata.
La verdad es que el que, a diez años del principio del fin de HidroAysén, campaña en la que ACERA fue parte, de la Agenda Energética resultante de aquel entonces y de dos años debatiendo la Política Regional de Energía, con amplia participación de todos los involucrados, el que alguien siquiera pretenda resucitar dinosaurios, es por decir lo menos, insólito. ¿O es que esa es la idea de estos esfuerzos por poner la hidroelectricidad en el tapete? ¿Y/o será parte del espíritu y añoranza de volver a ciertos tiempos del pasado que impera últimamente?
De hecho, llamó la atención la ausencia en este seminario del seremi de Energía y el notable olvido por todos de la existencia de la Política Energética Regional de Aysén. Si bien en el gobierno anterior la intentaron pasar al olvido, sin lograrlo, no estaría demás rescatarla, hacerla pública y utilizarla como base, en vez de seguir dando espacio a aventuras prehistóricas y darnos vueltas en circulo en vez de avanzar.
Ahora, nuestra posición ante la hidroelectricidad, es que somos partidarios de las micro y minicentrales, aunque no en cualquier parte, ni pasando por encima de las comunidades, patrimonio, biodiversidad, destrucción del turismo y áreas protegidas. Lo mismo con otras energías renovables no convencionales. Es más, hay varias de esas centrales abandonadas ¡incluso una al lado del contaminado Coyhaique!
Finalmente, como que se suele olvidar que son los sistemas aislados de la región y sus comunidades (los que no le interesan a la empresa), los que requieren más atención, ingenio y tarifa equitativa. Así tenemos algunos en islas donde no hay posibilidad de solución hidroeléctrica (pero si mareomotriz) y otros vecinos a los mayores ríos del país, donde tal vez sean factibles centrales no invasivas de flujo, y sin embargo, obtienen su energía con diésel a un altísimo costo.
